IONIZACION BIPOLAR
LIMPIA EL AIRE NATURALMENTE
Los iones naturales están en todas partes al aire libre y trabajan constantemente para limpiar el aire. Los iones se crean con la energía del agua que corre, las olas rompientes e incluso la luz solar. La tecnología NPBI de GPS genera iones sin producir ozono u otros subproductos dañinos, por lo que puede llevar la frescura del exterior al interior.
La tecnología NPBI de GPS limpia de forma segura el aire interior. Esta tecnología patentada produce una alta concentración de iones positivos y negativos, entregándolos al espacio a través del sistema de aire acondicionado. Dentro del espacio acondicionado, los iones se adhieren a las partículas, donde se hacen más grandes y se filtran más fácilmente en el retorno del equipo. Cuando los iones entran en contacto con patógenos, interrumpen las proteínas de la superficie de los patógenos, dejándolos inactivos.
A través de la tecnología patentada por GPS, ionización bipolar de punta de aguja, también conocida como NPBI ™, nuestros productos purifican el aire interior mediante la eliminación de partículas, olores y patógenos en el aire, todo mientras le ahorran consumo de energía y reducen su huella de carbono.
El GPS proporciona aire limpio en interiores sin producir ozono u otros subproductos dañinos.
Los contaminantes, el polvo, el polen, el humo e incluso los patógenos como el moho, los virus y las bacterias pueden estar suspendidos en el aire que respiramos, incluso cuando no se pueden ver.
La ionización bipolar de punta de aguja (NPBI) crea y libera iones de forma segura utilizando su sistema de aire acondicionado. Cuando estos iones se dispersan en el espacio acondicionado, buscan y forman enlaces con partículas en el aire a través de un proceso llamado aglomeración. Esto crea un efecto de bola de nieve en el que las partículas comienzan a agruparse. Cuanto más grande sea un grupo de partículas, más fácil será para su sistema filtrarlo. Este proceso está probado por pruebas de laboratorio independientes como seguro y efectivo.
El contacto con iones positivos y negativos tiene efectos microbicidas sobre los patógenos, que finalmente altera sus proteínas superficiales y las vuelve inactivas.